Cada tipo de piel se ve afectada por la acción de factores endógenos, edad, clima y malos hábitos.
Esto también se aplica a las pieles mixtas y grasas caracterizadas por una mayor producción de sebo y, por consiguiente, con una mayor oleosidad y una tendencia a desarrollar pequeñas imperfecciones.
En el tratamiento de este tipo de epidermis, la acción del ácido glicólico es indispensable. De hecho, su acción exfoliante y purificante actúa principalmente a nivel de los poros eliminando las impurezas. Además, su acción ligeramente acidificante regula sabiamente la producción de sebo. La presencia de los péptidos en esta función es esencial porque dan apoyo al ácido glicólico para mantener la piel limpia y libre de microrganismos.
El resto de nobles componentes del extracto de baba de caracol, contenida en un alto porcentaje en Elicina Crema, con su acción nutritiva y regeneradora contribuye al logro de los resultados esperados: una piel correctamente hidratada, limpia de impurezas, regenerada, lisa, suave y radiante.
Los test clínicos, realizados sobre las marcas del acné, también confirman que Elicina reduce el exceso de grasa, según el 80% de los voluntarios, y afina los poros de la piel, según del 73% de los voluntarios.